Por Jacqueline Ballista
Periodista y Pastora

Opinión.-Es muy difícil atrapar a la persona de Freddy Beras Goico en una sola palabra.

Mencionarlo en tiempo pasado también es difícil, pues alguien como él, quien incidió tanto en la sociedad dominicana, permanece en nuestra memoria como si estuviera vivo.

Un hombre sobre-dimensionado.

Es casi indefinible este ser humano dotado por Dios de tantos y trabajados talentos, los que le hacen diferente, grande, alguien a quien escuchábamos como educador, como un padre, como un líder nacional confiable. Era un ser polifacético y un ser humano de profundas pasiones.

Es tanto a la vez y, por eso sólo quiero en este instante reconocerlo como “un gran patriota”.

La bandera debe estar a media asta y la nación sebe estar de duelo, a la vez que dispuestos todos los dominicanos a imitarlo, sobre todo al Freddy de los últimos tiempos, quien se dejó alcanzar por la Gracia de Dios y afirmaba siempre en su programa de televisión que Jesucristo es el Señor.

Freddy será eterno en la República Dominicana, en el corazón de todos los que aprendimos amarlo.

Hasta pronto Freddy: Lo hiciste muy bien como patriota.

No quería que te fueras aún, porque egoístamente pensaba que te necesitábamos, pero Dios te llevó a descansar y a vivir por la eternidad.

La República Dominicana está de luto.