Opinión.-El estado de arrabalizaciòn del entorno del Hospital Juan Pablo Pina ya trasciende toda tolerancia a la solidaridad con aquèllos que no tienen empleo y mantienen sus familias de ventas de comida, frituras, cafè, jugos, frutas, motoconcho, y taxis (Estos ùltimos los màs decentes y necesarios), etc.

Con todos estos brotes de enfermedades, seguir permitiendo la presencia de estos invasores pasivos, que luego se convierten en agresivos, pues se adueñan de los espacios, sin respetar que se colocan frente a casas de familias que quedan en la zona.

Ay! de quienes les reclamen silencio, como es el caso de los motoristas que se estacionan en la esquina de la casa donde siempre vivì, y que allì hablan de manera soez, enamorando a toda mujer que pase, sin considerar si hay enfermos en la casa, si hay niños, o ancianos, como es el caso de la casa de mi madre.

Ahora mismo, la situación es, que la casa de mi mamà queda en la Santomè esquina Benjamìn Uribe, y tanto de un lado como del otro hay dos carritos de fritura, y todo ese mal olor a aceite re-usado se mete en la casa, y algo màs, si llega alguien de la familia en su vehìculo no tiene donde estacionarse, porque parece que le dieron una licencia de propiedad.

Señores, y son un estorbo para el libre trànsito en una zona donde la ambulancia o cualquier vehìculo que llegue o salga con una emergencia, deben tener libertad de circulación, pero el tapòn que a veces èstos forman raya en lo bestial.

No sè que están haciendo las autoridades del Hospital, que incluso su fachada se ve afeada y antihigiènica. Supongo que por ser un Centro de Salud debe èste precisamente inspìrar confianza aùn desde lo que se ve desde fuera.

¿Se habrà dado el Ayuntamiento cuenta de este desastre? ¿O hay que ir a quejarse allà? ¿Què es lo que hay que hacer, para sin violencia, hacer que toda esa gente se retire de la zona?

Estamos demasiado incivilizados. Estamos vieviendo una locura. Esto es un pandemónium vergonzoso y decepcionante. ¿Quièn quiere vivir en una ciudad tan ruidosa, tan adocenada, tan tumultuosa, con tanta gente con rostros violentos?

¿Què nos està pasando San Cristòbal?

La paz se ha esfumado de nuestra ciudad y de este sector, como de otros. Frente al Hospital hay un ruido todo el dìa. ¿Y còmo puede alguien sanarse con tales condiciones? Seamos sensatos y pensemos de una manera que podamos reconstruir a esta sociedad, que ya es suciedad, alcohol. San Cristòbal es un pueblo que no brinda ninguna esperanza de progreso y bienestar.

Pobre de nuestros hijos, de las ancianas, de los enfermos; de las pobres gentes decentes que nos quedan que no tienen otra opciòn que “aguantar” tanta barbarie.

¿Què vamos a hacer con la anarquìa reinante alrededor del Pina? ¿Què vamos a hacer por San Cristòbal?

Si no ponemos orden AHORA, en poco tiempo esta ciudad serà por completo una selva, una cueva de ladrones, la vergüenza de todos nosotros, y la nùmero uno en todo lo negativo que se da en una sociedad sin Dios, sin educación.

¡Dios tenga misericordia de todos y podamos hacer màs de lo que se ha hecho por el bienestar de esta ciudad!

Dios bendiga nuestra ciudad