Por Miguel Angel Solano

SAN CRISTOBAL.- La vivienda de la concejal por el Partido Revolucionario Dominicano, Judith Cuello, fue tiroteada la madrugada del cdomingo último por hombres fuertemente armados a bordo de motocicletas quienes dispararon varias veces a su vivienda impactando su vehículo.

Una de las balas impactó el cristal delantero del vehículo de la concejal estacionado en la marquesina de su vivienda ubicada en el barrio Madre Vieja Sur del sector Los Transformadores de esta ciudad.

Judith dijo que eran pasadas las 3:30 de la madrugada del domingo, cuando uno de sus hijos, el de seis años de edad, al escuchar el estruendoso ruido provocado por el proyectil disparado por los delincuentes, despertó nervioso y muy atemorizado por lo que abrazó fuertemente a su madre con lágrimas en los ojos y no se despegó de ella hasta salir el sol, informó la dirigente perredeísta.

Cuello manifestó que han sido varias las ocasiones en que delincuentes han violentado su casa, han penetrado a su vehículo rompiendo uno de los cristales laterales sustrayendo documentos, equipos electrónicos y aromatizantes de diferentes marcas sin que den con el paradero de los malhechores.

Según ella, actos delincuenciales como estos no son para robarle, ya que los disparos realizados a su vivienda tienen el objetivo de atemorizarla y manifestó firmemente “no lo lograrán”. Judith, de manera desafiante, ha dicho que profundizará las pesquisas junto a los Departamentos de Investigaciones y Criminalidad de la Policía Nacional para que los malhechores sean sometidos a la justicia.

Judith expresó que antes y después del hecho recibió llamadas telefónicas por lo que las mismas estas están siendo investigadas para fines de lugar.

Varios vecinos y dirigentes de esa organización política han manifestado que todo este escándalo ha venido a relucir luego de que la dirigente de la juventud de este municipio diera su apoyo a la candidatura del recién electo candidato del PRD Hipólito Mejía y abandonara al derrotado aspirante presidencial Miguel Vargas Maldonado.